Sabemos que os encantan nuestras Obleas Pan de Ángel porque nos lo hacéis llegar todos los días en nuestras redes sociales. Desde aquí os damos las gracias por disfrutar como niños con nuestro producto, que nos hace sentirnos muy orgulloso de toda nuestra familia, que lleva más de 160 años elaborando las obleas artesanales.
Ya hace mucho tiempo que el abuelo Gaspar Martín Moreno empezó a hornear las obleas a la manera tradicional. Sería su nieto, Fabián Martín Tapia, quien se lanzó a comercializarlas. Y es que sólo una esmerada elaboración con productos naturales y el respeto a sus orígenes ha hecho posible mantener una tradición heredada durante cuatro generaciones y en la que se ha conservado la receta original.
Por eso decimos que nuestras Obleas Pan de Ángel son sencillamente exquisitas. Porque consiguen un efecto increíble con muy pocos ingredientes. La mezcla de huevo, harina y azúcar y su posterior horneado dan como resultado un producto natural y duradero, sin necesidad de colorantes ni conservantes. Y lo mejor de todo, un sabor que siempre nos traslada a nuestra infancia. Porque seguro que todos sois capaces de viajar en el tiempo cada vez que una Oblea Pan de Ángel cruje en vuestra boca. Esos paseos por el parque con vuestros abuelos, esos días de lluvia al lado de una bolsa de Obleas Pan de Ángel y esas meriendas en familia. Momentos que ahora podemos repetir en nuestra madurez.
Así que ya sabéis, no dejéis de enviarnos vuestros momentos compartidos con Obleas Pan de Ángel. Para nosotros es muy especial ver que nuestra tradición se une con la modernidad para que las sigáis disfrutando. Porque, además, son muy versátiles y valen para cualquier momento del día. Y es que ya lo hemos dicho, son la sencillez de lo exquisito.
